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miércoles, 26 de junio de 2024

La frente

Mientras duermes, una frente apoyada

en el cristal del salón rumia barro.

Han tiznado las estrellas con sarro,

apenas yerra carne desalmada.

 

Pienso, amor, en la cama inacabada,

en las hebras doradas con que amarro

el tiempo para evitar el desgarro

surgido de esta abulia silenciada.

 

Estallará la alarma en pocas horas

para sembrar más sal sobre la herida.

Entreveré desde el sofá tu ida

 

al ventanal, sabiendo que me ignoras.

Y buscarás respuestas con tu frente

apoyada en la marca de mi frente. 


domingo, 31 de enero de 2021

Patiens

Mientras tú en otros cuerpos dibujas
viejos lunares de segunda mano, 
y te arrulla tras un eco lejano
el sabor de mis lágrimas granujas,
 
yo hilaré el invierno con las agujas
del reloj, como anhela un viudo en vano
que vuelva su mujer algún verano
y bailen juntos en las horas brujas.
 
Penélope es una burda impostora
a mi lado y Job es un becario
contratado a tiempo parcial por obra
 
y servicio. Yo te espero; me sobra
paciencia para tejer tu sudario.
Roma no se construyó en una hora.

                                               @hpoeticus 

sábado, 21 de septiembre de 2019

Tu espalda

Tu espalda es la tarde que el sol espiga,
el fiel diamante donde se atrinchera
toda la flora de la primavera
que reniega de la escarcha enemiga.

En el secreto que la curva abriga,
soy Sísifo subiendo tu ladera,
un Rimbaud ahogado en su borrachera
haciendo del verso libre su auriga.

El secarral que mi boca humedece;
tu perfil de tigre que se estremece
viendo cómo el cachorro se acurruca.

Tu espalda es un río de piel de hiedra
donde mis dedos trepan, piedra a piedra,
la distancia entre el abismo y tu nuca.

domingo, 25 de noviembre de 2018

El uróboros

Cierta noche en que estaba muy borracho,
en uno de esos bares donde apenas
te tomas cuatro copas y las penas
transmutan por alquimia en desempacho,

se me acercó un tío y dijo: Muchacho,
vente, te ofrezco amor a manos llenas.
Y yo, tan fan de promesas ajenas,
sucumbí a sus ojos color pistacho.

Total, que piqué el anzuelo en su cama.
La luz me trajo a casa. Las certezas
pillaron a la resaca en pijama

cansada de coleccionar rarezas.
Y como no quería hilar un drama                                                
salí a beber para olvidar tristezas.

La frente

Mientras duermes, una frente apoyada en el cristal del salón rumia barro. Han tiznado las estrellas con sarro, apenas yerra carne desalmada....